Este miércoles en la sede principal de la UCI en Bergen, Austria desveló el recorrido de los próximos Campeonatos Mundiales de ruta, que se llevarán a cabo en Innsbruck – Tirol del 22 al 30 de septiembre.
El trazado rompe los paradigmas del embalaje para centrar toda su atención en los especialistas de la montaña, quienes como pocas veces en la historia contarán con la garantía de un terreno sumamente exigente para disputar el ‘maillot’ arcoíris en 2018.
La prueba acumula 5000 metros de desnivel en 265 kilómetros, con puertos que alcanzan altos porcentajes de gradiente. Uno de ellos en Gramartboden, que exhibe una rampa del 25%. Una vez coronado este ascenso los aspirantes afrontarán un tramo de 8.5 km hasta la meta.
El recorrido consta de una primera parte de 90 kilómetros en los que sobresale el ascenso a Gnadelwald, puerto de 2.6 kilómetros con un promedio del 10.5%. Aunque el verdadero desafío se concentra en el circuito de Innsbruck, al que los ciclistas darán seis vueltas (23.9 kilómetros cada una) subiendo a IGLS: 7.9 kilómetros al 5.7%.
En el desenlace se afrontará un circuito de 31 kilómetros en el que se incluye la subida a IGLS.
Por su complejidad y dureza, Innsbruck 2018 ha sido calificado por especialistas como el mundial más duro en 84 años de historia.
Recorridos por categoría y distancias:
Damas élite: 162.3 kilómetros con 2413 metros de desnivel acumulado.
Hombres sub-23: 186.2 kilómetros con 2910 metros de desnivel acumulado.
Hombres junior: 138.4 kilómetros con 1916 metros de desnivel acumulado.
Damas junior: 72.4 kilómetros con 975 metros de desnivel acumulado.
