Antes del contacto con la alta montaña, el velocista de la Selección Colombia, Nicolás Gómez, dio una muestra de fortaleza y clase en la exigente jornada de 160 kilómetros que partió de Tomblaine y finalizó en la localidad de Bar Sur Aube, con un sprint reservado para pasistas y especialistas en etapas de media montaña. Los neerlandeses Marij Van der Berg y Mick Van Dijke, líder de la general, volvieron a dominar el final imponiéndose con solvencia sobre el italiano Luca Colnaghi y el británico Lewis Askey.
Gómez, de estupendo desempeño durante toda la fracción, siendo clave en la ubicación del equipo en la parte alta del lote, ocupó la séptima casilla demostrando, una vez más, su condición de futuro clasicómano dada su capacidad para remates masivos y etapas de alto ritmo con premios de montaña explosivos.
«Tenía mucha expectativa en esta etapa, tenía muchas ganas de que empezara porque era un recorrido muy similar al del mundial, con lluvia, viento y subidas cortas y explosivas. Todo el día estuvimos adelante porque vimos que los días anteriores de lluvia y viento nos perjudicaron bastante. Al final me equivoqué de curva con otro corredor y pudimos remontar hasta la séptima posición. Son cosas que pasan cuando no tienes un equipo, pero feliz de las sensaciones y de la actuación el día de hoy», dijo el ciclista del Team Colpack Ballan, que en su debut en la carrera francesa ya cuenta con dos clasificaciones de etapa en el Top-10.
El seleccionado apoyado por el Ministerio del Deporte y Colombiana, salvó con buena nota una jornada que debido a la lluvia, el alto ritmo y el nivel técnico del recorrido, emergía en el panorama como un punto clave para no perder terreno en la general, librar accidentes y mantener la diferencia con los favoritos para afrontar las etapas de alta montaña.
Camilo Ardila figura como el mejor ubicado en la clasificación, a 6 minutos del neerlandés Van Dijke, y a 5:13 del noruego Tobias Johannesen, el mejor posicionado de los favoritos al título, ocupando el cuarto lugar a 47 segundos del liderato. «Hemos salvado muchas cosas: caídas, percances y muchas cosas que se presentan en competencia. Tengo que estar muy agradecido con Dios que he podido salvar estos días complicados, pero seguimos con la fe muy intacta, nada se ha perdido y todavía falta lo más duro que es la montaña, donde mejor nos va a nosotros los colombianos», dijo el tolimense, ganador del Giro de Italia Sub-23 en 2019.
El primer reto en la alta montaña será este jueves 19 de agosto, con un parcial de 137 kilómetros entre Champagnole y Sepmoncel, que presenta en su trazado tres premios tercera categoría al inicio, y sobre el final antes de entrar a un circuito de 26 kilómetros, el pelotón afrontará los 14.5 kilómetros al 5% de la Cote de la Combe du Lac.
El circuito se recorrerá en tres ocasiones con pasos por la segunda vertiente Cote de la Combe du Lac, categorizada de segunda categoría con 8.5 km al 4%.
